Nació en Boulogne y, aunque cuando era pequeña vivió en Inglaterra, regresó a Francia y finalmente residió en Alemania, país donde completó su formación.
Primero trabajó como maestra, a los 21 años, y a los 36, inició una trayectoria en paralelo: la de cuentacuentos. A los 46
años abandonó la docencia y se dedicó a contar cuentos de manera profesional. Tal vez Marie L. Shedlock sea la cuentacuentos más famosa de la historia.